En la ciudad más hermosa del mundo, donde todo es arte, donde verdes y azules son uno, en aquella esquina donde se funde decadencia y naturaleza…
Este es un llamamiento en voz alta, una petición de auxilio, una cuestión de vida o muerte. Necesito volver a aquella ciudad, no para admirar, no para ver la construcción vacía de Chillida, no para ver el monumento a Pío Baroja, ni siquiera para tocar el más bello pentágono de Serra.
Esto es un ruego para volver.
Hay un museo, la ampliación del museo de San Telmo en San Sebastián, obra de Nieto y Sobejano, una pequeña obra de arte que resuelve frio y severo, el encuentro entre la estructura urbana y el monte Urgull, un muro cuasi vegetal, que ilumina el límite entre paisaje natural y artificial.
No es un muro, es, … es una obra de arte, es una piel con heridas de guerra, es luz dramática por la noche, luz recelosa y macilenta, es verde cuando puede, es sobriedad, es el que define el espacio libre, es el vínculo entre renacimiento y naturaleza, es, … es bellísimo.
Begoña, Teresa, Sue, … necesito volver!!!
F.N.